2 de febrero de 2010

Esta es la historia de una pared blanca...

   ... que yo tenía en un rincón de la cocina.


La pared de un pequeño office donde cada mañana desayuno mientras ojeo el periódico (siempre un número atrasado...) y escucho de fondo a Carlos Herrera repetir, día tras día, que ya llevamos 7 horas perdidas... ¡Que tío! ¡Menuda vitalidad de buena mañana!


Como ya habréis imaginado, esta pared es muy importante, ya que es una de las primeras cosas que veo nada más levantarme y conviene, al menos, empezar bien el día...
Así que llevaba tiempo dándole vueltas a cómo decorarla y no acababa de encontrar nada que realmente me gustase...


Un reloj de pared sería una buena y práctica idea, pero... ¿Demasiado típico, no? Y eso que hay un montón de originales y divertidos modelos.
                                                     ¿Un collage de fotografías? Me encanta estar rodeada de fotos personales, pero... no me acababa de convencer demasiado.
¿Tal vez unos platos antiguos...?
Ya estaba empezándome a hartar de tanta indecisión por una simple y pequeña pared blanca cuando, de repente, se me encenció la bombillita y... ¡Ya lo tengo! He encontrado la solución. Algo decorativo, original y muy, muy práctico...

¡Una pizarra en la pared! O, mejor dicho, una Pared-pizarra

Aunque me costó encontrar la solución, la transformación final fue muy sencilla. Un pequeño bote de pintura especial para pizarras (negro mate) y ... Dibujos, recetas, tareas pendientes... Cada día ¡Una pared nueva!

7 comentarios:

  1. Chulísimo!!! Me encanta Jose!!! El día que encuentre un piso, te llamo para que me ayudes a decorarlo!!

    Besitos,

    Sandra

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  2. Gracias Sandra! Aunque tu casa también es muy chula y muy acogedora... jeje!. Muak!

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  3. Te ha quedado GENIAL!!!!
    Y cuando Sandra encuentre piso y vayas a decorarlo yo me apunto ¿vale.....? Que habrá que estrenar el sálón con una cenita con Shansuke, si prueba el sushi de Jose seguro que ya no querrá volver a Japón, lo se.
    Paula.

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  4. Muy buena elección. Además, al ser una pared llena de "recortes" (los interruptores de la luz, la viga del techo, la encimera de la cocina) llenas todos los huecos sin retales. El contraste pizarra-encimera-frente de cocina es muy acertado.
    Muy chulo, sí señora.
    Un día tenías que hacer un recorrido virtual por tu casa, para los que te seguimos y admiramos desde lejos.
    Besos.
    Rafa

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  5. Gracias Paula!! Rafa que el elogio venga de ti es todo un honor!!
    Besos

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  6. Jose, genial!!!vaya ojo el rafa,como ya te supones es una terraza agregada a la cocina, cuya pared va mejorándose con el tiempo. Buena idea lo del recorrido virtual.

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